“… por eso y por mucho mas, lo que el yankee necesita es una aumentada dosis de jarabe vietnamita…” Prontuario Criminal, Quintín Cabrera y Pancho Amat.
Osama Bin Laden fue denominado en los 80’s como “Luchador por la Libertad” por Ronald Reagan presidente del imperio por entonces. Eran épocas en que Osama Bin Laden, miembro de la realeza Saudita amiga y cómplice de las tropelías de los gringos por esos lares, era un súper héroe que luchaba contra el comunismo ateo. La CIA financió y preparó a los que Osama iba captando por tierras musulmanas que estaban dispuestos a ir hasta Afganistán a apoyar a los Talibanes quienes por esas épocas también eran grandes amigos de los Yankees en la lucha contra la Unión Soviética.
La CIA experta en saber usar bien las oportunidades exacerbó el fanatismo religioso de estos grupos. Los alimento con dinero, armas y una campaña favorable a través de los medios de comunicación que incluyo películas con Rambo incluido.
Y lograron su objetivo. Los soviéticos se fueron derrotados y agotados por la prolongada lucha en Afganistán y la crisis que vivían en su propia patria que luego se convirtió en el derrumbe del socialismo soviético. Y por supuesto estos “luchadores por la libertad” comenzaron a ser incómodos para los intereses imperiales. Los gringos necesitaban otra Arabia Saudita o cualquier otro reino del medio oriente o asiático, cualquier califato o caricatura de país que le entregaran las riquezas petroleras y gasíferas. Pero estos talibanes junto con sus socios de Al Qaeda les salieron respondones. Si bien odiaban el ateísmo comunista y la invasión rusa, no habían luchado para entregarles el país entero a ese occidente encabezado por los gringos que repudian por sobre todas las cosas su decadencia moral y sus nulos valores.
Pero quien se mete a hacer negocios con la CIA sale casi siempre trasquilado. Los gringos no tardaron en sacar las garras y mostrar su verdadero rostro. Recién se enteraban (y se lo contaban al mundo entero) que sus ex amigos de Al Qaeda y Talibanes ya no eran luchadores por la libertad sino que pasaban a la lista de grupos fundamentalistas islámicos y terroristas que oprimían mujeres y lapidaban a las infieles. Recién se enteraban que los talibanes no aceptaban ninguna disidencia ni política ni religiosa. Pero esa historia ya la conocen y no pretendo extender estas letras más de lo necesario.
Volviendo a Osama. Éste trato de negociar con los gringos cuotas de poder a la salida de los soviéticos. Al Qaeda, significa “La Base”. Y se llama así porque Osama tenía la base de datos de todos los milicianos, militantes y/o mercenarios a su mando. Y como los gringos no saben compartir el botín y es de mal gusto reconocer que te metiste a un país con mercenarios incluidos y tuvieron una corta luna de miel con los talibanes en el Poder, Osama y Al Qaeda ya no les eran útiles.
Para entender a Osama y Al Qaeda es necesario resaltar tres factores importantes: Israel y la masacre contra los palestinos, la realeza saudita corrupta y entregada a los designios del imperialismo norteamericano y su relación con la CIA. Israel ha ofendido hasta la humillación a los pueblos árabes, principalmente musulmanes y se ha ensañado con el pueblo palestino generando una justificada indignación que los lleva al martirio y acciones que solo pueden entenderse debido a la crueldad con que se le trata al pueblo palestino. La realeza saudita teniendo en su tierra la capital religiosa musulmana de La Meca con su posición pro occidental, pro israelí, incapaz de ayudar al pueblo palestino, provocó la exacerbación de fanatismo religioso y contribuyó a que las filas de Osama engrosen. Y esta situación de la mano con las garras de la CIA que es experto en pescar a río revuelto, financió y preparó a Osama y su ejército contra los rusos para luego de usarlos y ponerlos de ejemplo a lo que seguía en la lista de su interminable guerra contra todo aquello que les ponga trabas a su saqueo y colonización. Y así nació el nuevo enemigo mundial.
Después del ataque a Las Torres Gemelas, que significó que por primera vez en su historia los yankees supieran el dolor que significa lo que ellos hacen todos los días desde que nacieron como país, los gringos juraron venganza contra Bin Laden. Con ese pretexto invadieron Afganistán y luego Irak. Ambos países acusados de ser guarida, refugio y centro de entrenamiento de Al Qaeda. Acusaron a estos países de lo que ellos hicieron por casi dos décadas. El resultado hasta hoy es un millón y medio de asesinados, decena de miles de mutilados, miles de secuestrados en cárceles secretas con la complicidad de las “democracias europeas” y otros países serviles al águila imperial.
Los gringos se han apoderado de los yacimientos gasíferos y petroleros de estos países, han privatizado la seguridad en Irak con 150 mil mercenarios disfrazados de empresas de seguridad y han dejado 50 mil soldados por si las dudas. Y en Afganistán tienen todas las tropas que tuvieron en Irak para intentar demoler a la resistencia afgana.
Supuestamente la muerte de Bin Laden en Pakistán, su asesinato para ser exactos, debería significar el fin de las invasiones. Pero no será así, permítanme decir mis razones.
Según el departamento de estado norteamericano, fue uno de los torturados en Guantánamo quien dio los datos que llevó a la ubicación del líder de Al Qaeda, hace 4 años. Sabían también que Bin Laden no podía estar en campos de batalla en tierra afgana pues sufría de problemas renales por lo menos desde el 2001 que lo obligaban a estar en ciudades con servicios médicos en el tema. Entonces fue una invasión premeditada con alevosía y ventaja. Como siempre en la historia yankee mintieron hasta la náusea para poder invadir países y apoderarse de sus recursos.
En el momento del operativo de aniquilamiento Osama estaba en Pakistán con clara ayuda de un sector de los servicios de inteligencia pakistaní. Osama no se resistió y es obvio que un hombre de avanzada edad y con graves problemas renales no podía hacerle daño a los sicarios de la CIA. Según una de las hijas de Bin Laden, éste fue detenido y fusilado. Y según los voceros de la Casa Blanca su cuerpo fue arrojado al mar.
Este operativo también nos ha dejado claro que a los gringos les importó un rábano la soberanía pakistaní ya que ni les comunicaron que entrarían a su territorio para un operativo militar. Por supuesto ni siquiera se disculparon. Nos deja claro también que no tenían la intención de capturar a Osama para juzgarlo y demostrar la superioridad de la democracia occidental, sino que fueron con la claridad de matarlo. Y matarlo justo cuando Obama atraviesa el peor momento de su administración. Así se evitaban un juicio donde por todo lo explicado no quedarían bien parados pues Osama tenia mucho que decir sobre la relación Al Qaeda y CIA. Y de paso levantan la popularidad a un presidente que demostró que solo se diferencia de George Bush en el color de la piel.
Y el tirar su cuerpo al mar es para provocar la reacción de los seguidores de Al Qaeda con acciones armadas que justifique su permanencia en los territorios ocupados y les permita seguir esta sangría que solo podrá ser detenida cuando los pueblos del mundo exterminen al imperialismo en todas sus intentonas por las buenas o las malas.
Hasta la victoria siempre
Guillermo Bermejo Rojas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario